El estrés de los opositores
Que una persona que está preparando una oposición se muestre nerviosa es, hasta cierto punto, habitual. Que esto derive en un cuadro de ansiedad que haga necesario un tratamiento psicológico en Granada, no lo es tanto. Lo cierto es que no existen datos de cuántos opositores padecen problemas de ansiedad y depresión.
A la hora de analizar este problema, una de las principales cosas que hemos de tener claras es que es importante mantener una mínima red social y no aislarse. Es recomendable además incluir técnicas de control emocional en el día a día de los opositores. Si acudes a la consulta de Julieta Domenicone porque aspiras a un empleo público y crees que padeces estrés y ansiedad, te darás cuenta de que el estado anímico es crucial para poder mantener la atención y rendir en los estudios. Es igual de importante que la constancia.
¿Cómo identificar la ansiedad?
Padecer una cierta cantidad de ansiedad es normal y hasta cierto punto, deseable. Superado ese umbral, se llega a la parálisis o huida. Hay que trabajar este punto para quedarnos con la ansiedad productiva, que agudiza nuestras capacidades intelectuales.
Algunos síntomas de la ansiedad son fácilmente observables:
- Nerviosismo intenso desde un punto de vista fisiológico (palpitaciones, tensión muscular o incremento de la sudoración).
- Aceleración del pensamiento.
- Anticipación a posibles fracasos.
- Bloqueo (en ocasiones puede provocar que no se quiera acudir al examen).
- Problemas para conciliar el sueño.
- Trastornos estomacales.
- Mayor irritabilidad.
La verdad es que no existe ningún estudio que demuestre un vínculo directo entre la ansiedad y la obtención de peores resultados académicos. Lo que sí dificulta es el almacenamiento de la información, la organización y la recuperación de lo estudiado.
Algunos consejos para afrontar unas oposiciones
1.- Asumir la desmotivación como parte del proceso
Hay que aprender a superarla en el menor tiempo posible. Frente a los bloqueos, la desmotivación y la apatía, tenemos que ser capaces de desconectar. Es normal atravesar períodos de dudas y desmotivación. Por eso hay que compaginar nuestras metas, en este caso aprobar una oposición, con actividades que nos permitan distraernos. Recuerda que, a partir de los 90 minutos, la curva de aprendizaje empieza a bajar de forma acusada y que por eso hay que establecer descansos.
2.- No aislarse
Recuerda que las relaciones sociales son un elemento clave para favorecer las emociones positivas, fomentar la autoestima y tener la percepción de que se tiene apoyo social. Si un opositor se aísla, su estado anímico empeorará y esto repercutirá en el rendimiento. Es normal que sienta que no tiene recompensas a corto plazo por el esfuerzo realizado y que incurra en pensamientos negativos. Por eso, hay que reservar al menos un día a la semana para las relaciones sociales evitando quedar únicamente con otros opositores. Pasar el tiempo libre con el mismo tipo de gente puede provocar que hagamos comparaciones. Lo que has de hacer es focalizarte en tu trabajo y avanzar a tu ritmo ya que, muchas veces, las comparaciones son idealizadas o parciales.
3.- Fijar un horario para las gratificaciones
El opositor suele creer que, cuantas más horas emplee, mejores resultados obtendrá. A veces se olvidan de que, sin gratificaciones o premios diarios, la mente se satura y se bloquea. ¿Qué hacer? Por ejemplo, dedicar 30 minutos diarios al deporte al aire libre. De este modo, se amortigua el estrés y se estimula la secreción de endorfinas que estabilizan el estado de ánimo. Junto al descanso y a la alimentación, el ejercicio físico es clave de cara a mejorar el rendimiento. Mientras practicamos algún deporte, nuestro cuerpo libera hormonas como la dopamina, serotonina o endorfinas que proporcionan sensación de calma, placer y bienestar.
Ten en cuenta que es clave llevar una vida organizada y equilibrada. En cuanto a horarios de sueño, alimentación sana y ejercicio físico regular y pautado.
Por eso, con motivación, organización y constancia tu objetivo será mucho más sencillo de alcanzar y verás todos tus esfuerzos y sacrificios justamente recompensados.